Para conseguir ese equilibrio de una vida saludable es necesario aumentar la cantidad y la variedad de los alimentos que ingerimos
Para conseguir ese equilibrio de una vida saludable es necesario aumentar la cantidad y la variedad de los alimentos que ingerimos, en los cuales la fruta fresca debe ser básico en la dieta diaria, pues su aporte de nutrientes, vitaminas y minerales es esencial para el correcto funcionamiento de nuestro organismo.
Pocos cumplen las cinco raciones al día que se han de ingerir de frutas y verdura fresca. Además, no se debe limitar la variedad de frutas que ingerimos a tres o cuatro tipos, sino cambiar e incluir las frutas exóticas.
Aquí algunas de sus bondades:
1) Las frutas nos aportan agua, vitaminas, minerales, fibra y diferentes compuestos beneficiosos para el organismo.
2) Por sus antioxidantes, previenen el envejecimiento prematuro de las células, dándote una piel más limpia, joven, suave y sana y mayor calidad de vida.
3) Consumidas a diario, las frutas nos ayudan a prevenir distintas enfermedades como problemas cardiovasculares, trastornos digestivos, algunos tipos de cáncer y enfermedades neurodegenerativas, además de colaborar en la lucha contra el sobrepeso y la obesidad.
4) Son dulces, sabrosas, tienen pocas calorías y prácticamente nada de grasas saturadas (aquellas más perjudiciales para el organismo), por lo que son un buen capricho cuando te entre tu vena más golosa.
5) Las frutas nos producen sensación de saciedad al contener fibra, así evitarás estar picoteando guarrerías todo el día. Además, su fibra nos ayuda a regular el tránsito intestinal y evitar el estreñimiento.
Fuente: https://www.eluniverso.com/