Evitar las caídas es clave, pero no son las únicas responsables.
A medida que el ser humano envejece sus tejidos se vuelven más frágiles y delicados. Y no solo se ven los huesos afectados, sino también el cerebro. Esa verdad toma cuerpo cuando se examina lo que le puede suceder al cerebro de una persona mayor después de un golpe en la cabeza.
Recientemente se estrenó en Estados Unidos, la película Concussion (en inglés), palabra inglesa que puede traducirse al español como “conmoción cerebral”. En la película se describe la lucha de un médico patólogo contra el sistema que se niega a reconocer sus investigaciones científicas. Estas demostraban que los golpes repetidos en la cabeza de los jugadores de fútbol americano ocasionaban una grave degeneración de los tejidos llamada encefalopatía traumática crónica (ETC), la cual les provocaba la muerte.
Al ver la película, mucha gente sale con la idea de que los golpes en la cabeza son un problema de gente joven, cuando lo cierto es que los golpes en la cabeza ocurren a toda edad. Sin embargo, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades reportan que millones de personas mayores de 65 años se caen cada año. Se estima que anualmente, una de cada tres personas mayores se cae, pero menos de la mitad busca ayuda médica. Caerse una vez duplica la probabilidad de caerse de nuevo.
Cómo ocurren y algunos mitos
Se define como conmoción cerebral el daño que se produce en el cerebro como consecuencia de un trauma en la cabeza y que origina una alteración en la función cerebral. Si bien es cierto que la mayoría de las conmociones cerebrales son producidas por golpes directos a la cabeza debido a caídas, pueden ser producidas también por movimientos bruscos de la cabeza; por ejemplo, en respuesta a un accidente automovilístico. Dependiendo de la intensidad del trauma, dichas conmociones pueden ser leves, moderadas o severas y sus síntomas ser pasajeros o persistir durante toda la vida.
Un mito es que, para que ocasionen daño, los golpes en la cabeza deben ser intensos y repetidos. Si bien es cierto que eso puede ser cierto para los jóvenes, no lo es para las personas mayores, en quienes —por lo frágil y delicado de sus tejidos— muchas veces golpes insignificantes en la cabeza pueden causar un daño cerebral muy severo.
Cómo identificarlas
Algunos síntomas de la conmoción cerebral son: pérdida de conciencia, olvido del momento posterior al golpe, confusión, desorientación, mareos, nausea, vómitos, convulsiones, problemas para ver, oler e incluso parálisis de alguna parte del cuerpo. Algunas personas mayores no presentan síntoma alguno después de una conmoción cerebral o son muy leves y se presentan días o meses después del golpe en la cabeza.
Posibles complicaciones
La complicación más frecuente de una conmoción cerebral es el síndrome post conmoción. La persona puede arrastrar por muchos años dolores de cabeza, mareos, fatiga, cambios de carácter, dificultad para concentrarse y recordar las cosas e insomnio. Las conmociones intensas y repetidas, como se vio en la película Concussion, pueden causar grave daño cerebral permanente e incluso demencia. Recientemente se ha demostrado que las conmociones cerebrales moderadas o severas, en personas mayores de 55 años, o leves, en personas mayores de 65 años, aumentan el riesgo de desarrollar demencia.
Una complicación muy peligrosa de la conmoción cerebral en el adulto mayor es el llamado hematoma subdural, que ocurre cuando se rompen las finas venas que recubren la dura madre o “cáscara del cerebro” y provocan una hemorragia cerebral que se va produciendo lentamente, gota a gota, durante varios meses. Cuando esa colección de sangre (hematoma) alcanza un cierto tamaño, origina alguno de los síntomas anteriormente mencionados. Y luego de consultar al médico y hacerse los estudios pertinentes, este encuentra un enorme coagulo cerebral que comprime el cerebro. El paciente debe ser operado de urgencia para drenarle el hematoma y salvarle la vida. Lo llamativo es que en la mayoría de los casos, el golpe fue tan leve e inaparente que la persona no recuerda haberse golpeado.
Cuándo visitar al doctor
En realidad cualquier golpe en la cabeza, independientemente de los síntomas, debe motivar una visita al médico. Este, luego de conocer los detalles del golpe y examinar minuciosamente el sistema nervioso del paciente, podrá ordenar una tomografía axial computarizada (CT Scan) o una resonancia magnética nuclear (MRI) del cerebro. Este último puede ser muy útil como examen de base, en caso que la persona desarrolle una complicación meses después de la conmoción. ¡Ojo! Si tú o alguien que conoces toma un anticoagulante (por ejemplo, warfarin, también conocido como Coumadin), y sufres un golpe en la cabeza, es importante consultar un médico inmediatamente.
Cómo prevenir las caídas
Debido a que las caídas son una de las causas más frecuentes de los golpes en la cabeza, de las personas mayores, es muy importante evaluar el medio ambiente en el que se vive, además de aprender a reconocer y aceptar que el balance natural del cuerpo puede haberse perdido con la edad. Muchas personas mayores se resisten al uso de bastones o andadores porque consideran que el uso de los mismos “las hacen ver muy mayores”. Si a esa falta de aceptación de que el balance no es el mismo, le agregamos que se vive en un medio ambiente en el que hay alfombras pequeñas resbaladizas, pisos muy lustrados y resbalosos o cordones eléctricos sueltos, el riesgo de una caída y un golpe en la cabeza aumenta significativamente.
La labor de un buen cuidador a cargo de una persona mayor está precisamente en ayudarla a entender que tiene limitaciones, asistirla en sus desplazamientos dentro de casa y preparar la habitación para disminuir los riesgos de una caída.
La mayoría de las caídas en las personas mayores pueden prevenirse, con lo cual podrán también prevenirse los golpes en la cabeza y la conmoción cerebral.
Fuente: https://www.aarp.org/