La manera en la que el oído interpreta el sonido es muy peculiar, pero a su vez el oído puede ser muy sensitivo.
Cuando escuchamos las ondas de sonido entran por el oído llegando directamente al tímpano. Los pequeños huesos que se encuentran en el oído medio son estimulados. El sonido es transformado en la cochlea y enviado al cerebro.
Cuando utilizamos audífonos, el sonido pasa directamente al canal del oído provocando un incremento en la presión interna. El uso constante del audífono provoca la producción de cerilla que a su vez provoca más humedad aumentando los riesgos de infecciones en el oído.
¿Y qué sucede cuando escuchamos música a todo volumen?
Si esta acción se produce por mucho tiempo puede ocurrir:
- Se puede dañar el oído medio
- Se afecta el sistema nervioso
- Pueden dañarse los receptores auditivos
Soluciones
Algunas soluciones para esto es utilizar los audífonos que van por encima de la oreja, mejor conocidos en inglés como «Over-Ear Headphones».
No escuches la música por más de una hora y no más fuerte de 80 decibeles.
Fuente: facebook.com/brightside