El cáncer de mama (seno) es una enfermedad en la cual las células de la mama comienzan a multiplicarse sin control de forma anormal. Puede comenzar en cualquiera de las tres principales partes de la mama: lobulillos, conductos o tejido conectivo. El tipo de cáncer de mama dependerá de qué células de la mama impacte.
En algunas personas esta enfermedad no presenta signos o síntomas. Éstos pueden variar de persona en persona. Es importante que conozca la apariencia, la forma y la sensación normal de sus senos, examínelos.
Preste atención a estas señales de advertencia del cáncer de mama que debe consultar con su médico de inmediato:
- Una masa, bolita dura o la piel más gruesa en la mama o la axila.
- Hinchazón, calor, oscurecimiento o enrojecimiento de una parte de la mama.
- Cambio en el tamaño o la forma de la mama.
- Hoyuelos o arrugas en la piel.
- Picazón, dolor, escama en la piel o sarpullido en el pezón.
- Irritación o hundimiento en la piel de la mama o en el pezón.
- Secreción repentina del pezón, que no sea leche, incluso sangre.
- Dolor reciente y persistente en cualquier parte de la mama.
Para combatir el cáncer es necesario detectarlo a tiempo y tratarlo de inmediato. Hable con su familia sobre antecedentes familiares que pueda tener. Consulte con su médico sobre su riesgo para cáncer de mamas y pregúntele cuáles exámenes de detección son indicados según su riesgo. Practique un estilo de vida saludable manteniendo un peso saludable, evitando el consumo de alcohol, realizando 30 minutos de ejercicios diarios y si se encuentra en edad reproductiva, lacte a su bebé. Su médico es su mejor aliado para la salud; consúltele sobre el uso de hormonas postmenopáusicas.
La detección temprana del cáncer de mama aumenta las posibilidades de sobrevivirlo.
Por: Tania Mangual-Monzón, MS, BHE
