Mascar chicle hace que aumente la producción de saliva, la cual tiene un efecto antibacteriano. La saliva consigue eliminar parte del ácido que se forma en la cavidad oral con la descomposición de los alimentos. De esta forma, segregar mayores cantidades de saliva puede suponer una garantía de protección para la salud oral, previniendo la aparición de enfermedades infecciosas como la caries o la enfermedad periodontal.
Además, hay otro dato interesante a tener en cuenta: el esmalte dental también puede salir beneficiado cuando masticamos chicle sin azúcar. ¿La razón? Incrementar la producción de saliva también repercute, directamente, en la generación de mayores cantidades de minerales.
¿Puedo dejar que mi hijo mastique chicle?
Teniendo en cuenta todo lo comentado, la respuesta es sí. Siempre y cuando, el chicle sea sin azúcar. De lo contrario, podría producir el efecto contrario y fomentar la acumulación de placa bacteriana.
Recuerda que para que tu salud oral sea óptima debes mantener una frecuencia regular de visitas al dentista, realizando una consulta cada seis meses. Tu sonrisa te lo agradecerá.
Fuente: clinicacolvee.es