Dormir bien es una de las necesidades básicas de cualquier persona, no obstante, a algunos les resulta difícil conciliar el sueño, ya que, en ocasiones, sencillamente tu mente no quiere detenerse y no puedes dormir.
Sin embargo, si eres de ese tipo de personas no te preocupes, porque hay una solución, una técnica milenaria conocida por sus múltiples beneficios a la salud: el yoga.
La tensión, el estrés y el pensar demasiado son los principales responsables de que no te puedas desconectar y relajarte, situación que tu sueño reciente.
Es sumamente importante que aprendas a respirar y a dedicarte un poquito de tiempo para conseguir que tu cuerpo y mente se oxigenen. En ese sentido, te mencionamos a continuación 3 posturas de yoga que te ayudarán a dormir rápido y a descansar de verdad.
Cabe destacar que practicar estas posturas de yoga antes de dormir podría ser la solución que estabas buscando a tu insomnio, ya que con ellas te conseguirás liberar del tan molestoso estrés.
1. Savasana (postura de relajo)
De acuerdo al portal Yogaye, si bien parece ser una de las posturas de yoga más fáciles, se practica generalmente al final de la sesión y su propósito es integrar los beneficios de la clase en esta posición de relajación absoluta y consciente, razón por la cual es una de las más complicadas.
Para realizarla, debes colocarte en el suelo mirando hacia arriba, con las piernas extendidas y ligeramente separadas, y los brazos a los lados del tronco con las palmas mirando al cielo. Cierra los ojos y repasa mentalmente todo el cuerpo, relajando cada parte poco a poco.
Esta es la posición perfecta para prepararnos antes de dormir, ya que con ella acabamos con el estrés, calmamos la mente, soltamos los músculos, reducimos la presión arterial, combatimos los dolores de cabeza y el insomnio.
2. Bhujangasana (postura de la cobra)
Conocida también como ‘la postura de la cobra’, con esta postura lograrás aliviar el estrés y el exceso de fatiga, además de conseguir una digestión menos pesada y una disminución del dolor de espalda.
Para realizarla, debes colocarte boca abajo en el suelo con las piernas estiradas y elevar el tronco, ayudándote con los brazos. La pelvis debe mantenerse pegada al suelo y las palmas de las manos tienen que estar siempre en paralelo.
3. Parshvottanasana (la pirámide)
Llamada también como ‘la postura de la pirámide’, su principal objetivo es estirar toda la columna vertebral, librándote de esa rigidez que suele acumularse en las cervicales y las lumbares.
Además, destacan que esta postura ayuda a oxigenar nuestro cerebro.
Se realiza de pie, con las rodillas estiradas y los pies en paralelo. Tienes que adelantar una de tus piernas y flexionar el tronco hasta tocar con las manos el pie adelantado. Tras esto, relaja la musculatura y siente cómo el cuerpo se destensa.
Fuente: pagina7.cl